Por: L. Alarcón

En diálogo con PROVINCIA NOTICIAS, Carlos Kambourian, ex candidato a concejal en Malvinas Argentinas y reconocido médico pediatra, analizó el rol del gobierno nacional y provincial en la pandemia y señaló que “la evaluación es la misma para los dos gobiernos, van en la misma línea, y esa línea fracasó, y desde el primer día. Y se agigantó ese fracaso desde que se vacunaron ilegalmente. Es el país que peor manejó la pandemia según los registros internacionales, con 116 mil muertos. No lo dice Kambourian, lo dicen los organismos internacionales”. 

En esa línea, el doctor de medicina infantil explicó que “en la provincia se agrava aún más por las condiciones en que está. Y no mejoraron nada en los últimos 25 años que llevan en el poder”.

A dos años del comienzo de la pandemia, aún quedan secuelas en la sociedad, entonces, señalan algunas personalidades de la medicina argentina, que el gobierno no estuvo a la altura de las circunstancias.

Por lo tanto, Kambourian afirmó que “por supuesto que quedan secuelas en la sociedad, y en particular por esta pandemia, porque no hubo un gobierno que acompañe el tratamiento de estas secuelas, y de todo tipo, sociales, psicológicas, económicas. El comité de expertos serio que conformó el gobierno, y que en rigor de verdad era un grupo de amigos, hubiese sido otra cosa, distinta”. 

En cuanto a la salida de Daniel Gollan y llegada de Nicolás Kreplak, el referente del PRO en Malvinas Argentinas expresó que “no cambió nada en el manejo de la pandemia. Son lo mismo, uno es jefe del otro. Lo mismo pasa en nación con Gines González García y Carla Vizzotti. Nunca imaginé un cambio positivo con esos movimientos políticos que hicieron”.

Y agregó: “Las únicas condiciones que tiene Kreplak es de un militante de una agrupación política, nada más. Y eso está demostrado en sus dichos, y se observa que solo gestiona para una parte de la sociedad bonaerense y elimina a la otra. Él es un ciudadano que pertenece a una agrupación política fundamentalista que es La Cámpora y ahí se desarrolla. Tendríamos que preguntarnos qué hizo Kreplak por la salud de la provincia de Buenos Aires, que sucedió desde su llegada. Qué cambió. Qué deja de acá en adelante. La respuesta es nada”, sacudió.

Sobre las medidas que debería aplicar el gobierno para la actualidad epidemiológica son las que se deberían haber tomado desde el día 1, es decir, cientos de miles de test, saber qué variantes hay, dónde están, y aumentar la vacunación, porque el plan de vacunación es solo un anuncio oficial pero poco movimiento se ve en los vacunatorios, y hay que considerar que el 80 por ciento de la sociedad no está vacunada, porque no hay terceras dosis y pasados seis meses de la segunda dosis deja de estar vacunado. Claramente el plan de vacunación no existe en la Argentina.

Amén de los anuncios de los dirigentes políticos que tienen responsabilidades en el control de la pandemia, aún las vacunas generan desconfianza. Esto está demostrado en el alto porcentaje de chicos que aún no fueron inscriptos para ser inoculados. En ese contexto, Kambourian aseveró que "la destrucción de la confianza en las vacunas se dio porque las aplicaron sin la aprobación de organismos internacionales. Lo que no entendieron es que cuando existe una pandemia de estas características, el bloque es uno solo, donde se estudie si las vacunan sirven y funcionan. En Argentina la aprobación surge de un ente político, gobernado por la política, por lo tanto, es muy parcial lo que sucede con las vacunas en la Argentina. Y esta ruptura en la confianza, lo que hará es que la gente comience a desconfiar cualquier vacuna. Hay que recordar que la ministra de Salud de la nación nos mintió. Dijo que los chicos se estaban vacunando en China y eso no era verdad”.

Para finalizar, Carlos Kambourian sentenció: “El gobierno perdió las elecciones por todas las cuestiones nombradas. El presidente de la nación no puede hacer una fiesta clandestina en la casa de todos, que es la casa de presidencial cuando el resto estaba encerrado sufriendo todo tipo de torturas como económicas, psicológicas, sanitarias. La primera dama viajaba por todos lados cuando el resto no. Perdieron porque uno sale a la calle y no sabe si vuelve. Si los precios de una leche de hoy es el mismo de mañana. Perdieron porque lo gobierna la vice presidenta Cristina Fernández que hoy está en silencio, escondida y agazapada esperando que algo suceda para volver a tomar el poder. En síntesis, perdieron las elecciones porque la gente les dijo basta”.