Envalentonados por las palabras que esbozó el gobernador Axel Kicillof en la Casona del Parque Pereyra sobre el posicionamiento para disputar el 2027, los jefes comunales salieron a cuestionar a la ex dos veces presidenta, Cristina Fernández de Kirchner y cuidar a su nuevo líder, el mandatario provincial.

Uno de los que primero salió a criticar la carta de la ex mandataria nacional fue Mario Secco, intendente de Ensenada y otrora adulador al extremo de Cristina y Néstor Kirchner. El ensenadense apuntó que "me da bronca cuando quieren gastar al gobernador y nos toman de punto a nosotros. Fuimos las mulas mucho tiempo. Cuando ganábamos por 40 puntos, el que ganaba era otro".

También se plegó a los cuestionamientos el jefe comunal de Salto, Ricardo Alessandro, quien señaló que “Yo quiero que Kicillof sea presidente, pero teniéndolo a Máximo Kirchner, a La Cámpora y a Grabois al lado, no creo que sea potable”.

Otro alcalde fue el de Berisso, Fabián Cagliardi, quien se sumó a Secco, su padrino político, y lanzó que “la expresión de Cristina no tiene validez” y agregó que “la gente le dijo ‘no’ a La Cámpora y está buscando otra cosa”.

El que se sumó también a las seguidillas de críticas hacia la ex presidenta fue el intendente de Castelli, Francisco Echarren, quien siguió la línea de Cagliardi y sostuvo que “no sumó nada la carta de Cristina, despertó enfrentamientos en el peronismo y en la gente. Cuando uno analiza, nada positivo surgió de esa carta. No es que el peronismo se unió más, sino todo lo contrario, y generó mucho enojo porque nos cayó mal”, explicó en declaraciones periodísticas.

En esa línea, el alcalde de Castelli sostuvo que “tenemos la responsabilidad de defender a la provincia de Buenos Aires. No entiendo por qué no se lo cuida al gobernador. Cada día tenemos un poco menos de margen para pelearnos entre nosotros”.

 Y remarcó: “Axel está plantado a todo lo que hace Milei y construye una alternativa. Por eso, lo menos que hay que hacer es criticarlo, sino apoyarlo”.

Así las cosas, los intendentes que responden al gobernador Axel Kicillof se sienten contenidos y se animan a lo que siempre la temieron: criticar a Cristina Fernández de Kirchner.