Por: Claudio Gómez

Tras la confirmación que será candidata a diputada provincial, Cristina Fernández de Kirchner alegró a muchos y preocupó a varios. En la vereda de la alegría están los cristinitas/kirchneristas que nunca dudaron en quedarse o sumarse a las filas del kicillofismo.

Entre ellos están Diputados, senadores, intendentes y dirigentes, y fue el jefe de bloque de Unión por la Patria en la cámara baja, Facundo Tignanelli, quien retomó la canción de “Muchachos” de la selección Argentina para adaptarla al momento político de la jornada.

“Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar: quiero ganar la Tercera” escribió en su cuenta de Twitter el representante de Máximo Kirchner en Diputados de la PBA, Facundo Tignanelli, y con él decenas de seguidores y dirigentes.

Se sabe que el conurbano es el que define la elección en la Provincia. La Primera y la Tercera sección son vitales para el triunfo y por eso Unión por la Patria va a fondo en ese plano con la prioridad, ahora, donde va a jugar Cristina.

“No es que la unidad te permita ganar, pero si estás dividido seguro que perdés, y perdés mal” dijo CFK y de esta manera dejó abierta la posibilidad de hacer las paces con el gobernador y encarar la elección unificados. Ahora, qué pasaría si no hay unidad. Qué hacen los intendentes de la Tercera que apoyan al gobernador, se le animan a competir a Cristina.

La muestra de un análisis que arrojaron sobre la mesa algunos dirigentes kirchneristas es lo que puede pasar en La Matanza con la participación confirmada de Cristina Fernández. Hoy Fernando Espinoza, mandamás del distrito juega con Axel Kicillof, pero las encuestas muestran que CFK mide más del 70 por ciento en intención de votos y apenas un 30 el gobernador, y ahí aparece la duda.

Espinoza sabe que su principal amenaza siempre fue, y ahora lo es más que nunca, la ex diputada provincial del Movimiento Evita Patricia Cubría, que en las elecciones pasadas, con todo el aparato municipal en contra obtuvo el 40 por ciento de los votos. Entonces, evalúan algunos en el distrito que, si sola sacó ese porcentaje, cuánto puede sacar si camina la comuna al lado de Cristina.

Por supuesto, y haciéndole honor a la política pragmática, Fernando Espinoza no dudará en volver a ser cristinista y acá no ha pasado nada. Lo mismo sucederá con la vice gobernadora, que ya le avisó a CFK que, si jugaba en la sección, la apoyaría. Veremos.

Lo mismo pasa en Florencio Varela, donde Cristina tiene una imagen positiva de 68 puntos. Y con eso surge la pregunta sobre qué hará Andrés Watson, si juagará en contra de la ex presidenta y de su jefe político, Julio Pereyra. Son interrogaciones que se van dilucidar a partir de los próximos días.

Otro punto a atender por parte del kicillofismo es quiénes serán los candidatos seccionales y locales. Por ejemplo ¿a quién van a poner en Loma de Zamora el axelismo? Con todo el aparato que tiene jefe comunal Federico Otermín y de atrás, Martín Insaurralde, quién se va a animar. Imposible. ¿Y en Lanús?

En Avellaneda, al revés. Jorge Ferraresi lo va a tener al senador provincial Emmanuel González Santalla como candidato opositor dentro del espacio peronista. El legislador tiene una estructura importante y el respaldo de Cristina Fernández, que cuenta con un acompañamiento electoral de las del 70 por ciento.

Con todo, dirigentes de ambos bandos sostienen que la unidad es lo que más le conviene al peronismo, y le remarcan a Axel Kicillof y sus principales asesores, que el día de la votación, no está el gobernador en la boleta, pues tendrán que entender que los candidatos deben surgir de un entendimiento interno que sostenga el poder en el territorio.