En la última sesión del Concejo Deliberante de 9 de Julio los ediles rechazaron la Rendición de Cuentas 2024 enviada por la intendenta PRO María José Gentile y desató un grave problema no solo en la gestión, sino que en la propia sociedad nuevejuliense que quiere saber dónde está el dinero que falta.

En ese marco, por supuesto que los representantes del oficialismo local dijeron que “hubo equilibrio financiero, en un contexto económico de inflación en 2024”.

Empero, desde el arco opositor, y de ex aliados, salieron las críticas y rechazos al proyecto de la intendenta Gentile.

En su discurso, el concejal de la UCR Ignacio Palacios señaló que “no podemos hablar de equilibrio fiscal cuando no se hacen obras, cuando no se cumplen con los servicios como corresponde, cuando hay un Estado ausente”.

Asimismo, planteó que “nos llamó la atención cómo pasamos de un equilibrio y un superávit de 500 millones a pedir la emergencia económica en cinco meses, cómo pasamos con la bandera del Pro de una buena administración, de un Estado eficiente, de tener superávit, tener plazos fijos, comprar bonos a en cinco meses pedir la emergencia. Nos llama la atención, es algo que no está andando bien”. Y agregó: “nos preocupa que del fondo educativo vinieron más de mil millones de pesos y se gastó sólo el 17 por ciento en obras, cuando la ley exige un mínimo de un 40 por ciento”.

En ese tren de críticas, el concejal radical sostuvo que “se recaudaron 96 millones de pesos en desagües y sólo se gastaron 2 y la ciudad se inunda. En red vial se gastó el el 44 por ciento y los productores no pueden sacar su producción, los tamberos no pueden sacar la leche, hay gente aislada y escuelas aisladas”, remató.

En tanto, la edil kirchnerista Julia Crespo de Unión por la Patria destacó que “la expresión que cierra en la planilla de Excel, estamos cansados de repetirla en esta banca. Pero como nosotros siempre reclamamos que los números tienen que cerrar con la gente adentro”.

Como se dijo, la jefa comunal PRO María José Gentile no transita por el mejor momento de su gestión, y además de marcarle los errores y de consultarla dónde está el dinero que ingresó a la comuna, le achacan que prefiere sacarse fotos con Mauricio Macri que estar cerca de la gente en el distrito.