

El Ministerio de Salud de la nación modificó la situación de atención del Instituto Nacional del Cáncer con el argumento de mayor "eficiencia" y reducción de "duplicidad de tareas" y con ellos causó una gran preocupación no solo en los pacientes sino que en toda la comunidad.
En ese marco, el senador provincial del radicalismo Alejandro Cellillo salió al cruce y diagnosticó como “grave” la decisión del presidente Javier Milei.
Planteó el legislador, médico de profesión, que “en su locura de hacer anuncios y ´eficientizar´ cualquier estructura del Estado, el Gobierno Nacional conducido por Javier Milei cerró al Instituto Nacional del Cáncer, corazón de la política oncológica en el país”.
Asimismo, remarcó Cellillo que “estamos hablando de una enfermedad que necesita un abordaje institucional a la altura de las circunstancias. El cierre del INC es una pésima señal, a contramano de sistemas de salud sólidos internacionales. Es una medida grave y no hay tiempo que perder”.
Aseguró el senador que “los perjudicados son, como siempre, los grupos más vulnerables. Pacientes oncológicos y sus familias quedan a la deriva, sin el respaldo de un Estado que debería protegerlos”.
Para finalizar, Alejandro Cellillo remarcó: “El abandono es total y las consecuencias, irreparables”.