Uno de ellos fue el intendente de Ensenada, que en declaraciones periodísticas señaló que "Massa, La Cámpora, Grabois arman espacio propio, pero si lo hace el Gobernador, rompe. Es muy pelotudo eso".

Por supuesto, la réplica massista no tardó en llegar, y provino desde las entrañas mismas del Frente Renovador. La palabra la tomó el dirigente peronista y director del Banco Provincia Sebastián Galmarini, quien le achacó al jefe comunal ensenadense que “no es nueva tu vocación petardera. Pero lamento decirte que el Frente Renovador ni Sergio Massa están preocupados por la interna. Nos preocupan otros temas más cercanos a los efectos de las políticas del gobierno sobre nuestra comunidad” como la “caída de la actividad, aumento de la desocupación, inseguridad, y otros”.

Señaló “Galma” que “solo trabajamos en construir una estrategia para ganarle a Javier Milei. Lo mismo que hicimos para sostener el gobierno, y retener PBA y muchos municipios con Sergio (Massa) como candidato”.

En ese tren de réplicas, Galmarini le propinó: “Y si de romper hablas, de tu parte no sería nada novedoso. No solo lo haces ahora para tu conveniencia. Ya le rompiste el ARI a (Elisa) Carrió en 2007”.

La referencia que Sebastián Galmarini le hace a Mario Secco tiene que ver con los orígenes del ex nestorista, después crisitnista y ahora kicillofista. Mario Secco llega a la política después de liderar el sindicato municipal en Ensenada bajo las banderas de la Unión Cívica Radical. “Un radical le ganó al peronismo” relataban en las calles de Ensenada en el 2003. Claro, Secco, afiliado desde 1983 a la UCR de Ricardo Alfonsín, llegaba a la comuna de la mano de Elisa Carrió, pero más tarde rompía la relación y transformaba mágicamente en peronista de Kirchner.

Después de romper con Carrió, el ahora mandatario comunal ensenadense pasó al Frente Grande de Chacho Álvarez, que ahora preside pero que, dicen, impuso iniciativas para que el espacio original se rompa para acomodarlo a sus intereses.

Con todo, ahora Mario Secco se transformó como ultra kicillofista, y no solo desde el Frente Renovador sino que también de los demás espacios que conforman UP, sostienen que varios de los que hoy forman parte del movimiento Derecho al Futuro buscan salvarse en algún puesto en el Congreso o Legislatura.