Agustín Romo, conocido como “Siesta” por quedarse dormido en una sesión, o “diputroll” por su habitual estadía en Twitter, se sumó como obediencia debida a las críticas que el presidente lanzó hacia Raúl Alfonsín.

Romo, hijo de padre colectivero y madre ama de casa, supo gozar de las mieles de las libres importaciones de los años 90 con el negocio de su progenitor sobre la venta de electrodomésticos.

Como se dijo, Romo se subió a la ola de improperios que lanzó su jefe y remarcó que “Eduardo Duhalde y Raúl Alfonsín le hicieron un Golpe de Estado a Fernando De la Rua para voltear la convertibilidad y pesificar la deuda en dólares de la casta mientras le robaban los ahorros en dólares de los argentinos dándoles pesos devaluados”.

En su particular visión de la historia argentina, “Siesta” Romo apuntó que “es la verdad y al que no le gusta se jode” parafraseando el cántico de los trabajadores que defienden sus derechos laborales.

En ese tren de críticas, el “diputroll” también cuestionó al líder kirchnerista y apuntó en su visión histórica que “Seguido a esto (golpe de Estado de Duhalde y Alfonsín), Néstor Kirchner rajó a 4 de 7 jueces de la Corte Suprema de Justicia, nombro a otros 4 y justifico la constitucionalidad de la pesificación asimétrica, el mayor robo de la historia”.

Y se preguntó y respondió a sí mismo: “¿Ustedes se llenan la boca hablando de instituciones y democracia? Tomenselá”.

Así las cosas, como fiel adulador de su jefe político, “Romito” también se sumó a las críticas a Raúl Alfonsín. Eso sí, deberá soportar las réplicas que los radicales y kirchneristas le propinarán en la sesión de esta tarde.