A horas de una nueva manifestación del peronismo y kirchnerismo contra el intento de magnicidio a la vicepresidenta Cristina Fernández, las críticas recaen sobre su organizador, el intendente K de Luján, Leonardo Boto.
Es que el jefe comunal que ahora brega por la paz social, acumula un sinfín de denuncias penales en su contra, cuestión que se verán agravadas, dicen, en los próximos meses.
Leonardo Boto fue el mismo que cuando era concejal, mediante un audio con otro dirigente, afirmó que tenía “ganas de ir y cagarla a trompadas” a María Eugenia Vidal, otrora gobernadora, luego de haberla escuchado en un discurso.
Como si el machismo del intendente, con la actitud de golpear a una mujer no fuese suficiente, además la catalogó como “loca”.
Por supuesto, la ex mandataria bonaerense radicó con la justicia una denuncia penal en contra del alcalde K, que por ahora ronda en la justicia de Mercedes.
La ex mandataria bonaerense en su momento pidió que se “investigue la posible comisión de un delito de acción pública” y aclaró que se hizo presente en el juzgado “en carácter de mujer y no de gobernadora, toda vez que las declaraciones del audio constituyen violencia verbal y por lo tanto en su calidad de ciudadana mujer se sintió violentada”.
También la gestión de Boto es reconocida en la zona por estar “floja de papeles”. La municipalidad tiene una presentación penal ante la Fiscalía Nª 10 de Luján por el diputado provincial de la Coalición Cívica Luciano Bugallo en donde se lo involucra al jefe comunal lujanense y a su secretario de Economía.
Entre las acusaciones figuran supuestas artimañas para favorecer a proveedores de alimentos sin experiencia y, uno de ellos, en situación de morosidad.
Como si eso no fuese suficiente, Boto tiene en carpeta de archivos otra denuncia por estafas y nuevas supuestas defraudaciones, hurto, destrucción de medios de pruebas y malversación de caudales públicos involucra al intendente de Luján, Leonardo Boto Álvarez, y otros funcionarios del municipio que gestiona el Frente de Todos.
En la presentación judicial figura que desde la comuna hay "presunta falta de mantenimiento de móviles policiales de la provincia, sustracción de vehículos secuestrados, defraudaciones en las compras de combustible y de repuestos, desaparición de autopartes y desaparición de motocicletas secuestradas en depósito".
Así las cosas, ahora se espera la sororidad con María Eugenia Vidal de las dirigentes del peronismo como la senadora nacional Juliana Di Tulli, su par bonaerense Teresa García, la ministra de las Mujeres, Estela Díaz o la Presidenta del Instituto Cultural, Florencia Saintout.