La majadera y mediática senadora bonaerense del PRO, Florencia Arietto volvió a quedar en el centro del debate pero como siempre, no por una propuesta positiva sino por un comentario torpe.
Como de costumbre, y creyendo que Twitter (X) es la meca de todas las salvaciones y curaciones de temas sensibles, escribió en su cuenta que “narco que desde dentro de la cárcel ordena un homicidio se le saca la ración de comida, lo vuelve a hacer se le quita la ración de agua. El Estado tiene que darle cuidado prioritario a los ciudadanos de bien como Bruno, no a los delincuentes”.
Claro, como siempre, y al mejor estilo Ricardo Darín en la película “Carancho”, Arietto se sube a cada desgracia ajena para intentar sacar algún rédito político, que la coloque en un puesto que de antemano le queda grande, como es la seguridad nacional.
Lo paradójico es que Arietto, pregonera de la frase “dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”, busca arrebatarle los derechos que una persona privada, que a pesar de cometer el peor de los delitos, lo ampara la legislación.
Según la ley nacional 24.660, “las personas privadas de libertad tienen derecho a que se respete su dignidad, a estudiar, trabajar, comunicarse y recibir visitas”.
La abogada y docente Claudia Cesaroni advirtió que “para una persona que está presa, recibir a su familia, y que su familia le lleve alimentación digna que complemente o suplemente la basura que le dan allí, es fundamental. No son beneficios, son derechos, al menos mientras en este país rija la Constitución Nacional”.
En tanto, Juan Malpeli, diputado provincial del Frente Renovador, presidente de la comisión de Derechos Humanos, aseguró que “en principio creo que es característico de Arieto, fulbito para la tribuna, carroñeando sobre un tema que amerita un debate serio y no declaraciones livianas que no suman ninguna solución”.
En esa línea, el legislador massista sostuvo que “yo estoy de acuerdo con el control, con acciones que pueden ser respuesta a la buena conducta o no, pero siempre dentro del marco de primero la Constitución Nacional (y provinciales) los Convenios y no avasallar los DD.HH que lo único que logra es convertirnos en bestias”.
Asimismo, indicó que “hay que ser serios y debatir y generar a partir de ese debate políticas claras de inclusión, de igualdad de oportunidades y de trato y obviamente también igualdad ante la ley con la correspondiente pena que las personas tengan que cumplir”.
Y agregó: “Además de los años que el Poder Judicial otorgue de cumplimiento de pena efectiva, ésta debe tener una mirada siempre apuntando a la reinserción”.
Así las cosas, y en su afán de mostrarse recia, dura y dueña de un pabellón ficticio, Florencia Arietto volvió a quedar en offside, y van.