A días de la finalización de las PASO, y aunque ya es archiconocido, aún resuenan los ecos que dejaron los cortes de boleta que le propinaron a Sergio Massa en varios distritos de la provincia y, para sorpresa de muchos, a Axel Kicillof.
Es que el gobernador también sufrió “la escondida” de los jefes comunales y candidatos de Unión por la Patria a lo largo y ancho del territorio. Claro, los postulantes locales priorizaron el pago chico que la casa grande, y, por supuesto, traerá consecuencias.
Uno de esos distritos es el de Moreno, comandado por la dirigente del Movimiento Evita, Mariel Fernández, que pasó la motosierra en los niveles presidente y gobernador. En esa comuna, Kicillof obtuvo 95.909 mientras que Fernández, recibió el apoyo de 113.463. Ni hablar de Sergio Massa, que solo consiguió 93.220.
En General Pueyrredón (Mar del Plata), localidad en donde la máxima referente es la titular del Pami, Fernanda Raverta, el gobernador cosechó 95.230 sufragios mientras que la candidata de La Cámpora recibió 101.111. Y Massa, la misma cantidad que el mandatario provincial.
Otro de los casos polémicos es el de Bahía Blanca, municipio que tiene como referente a Federico Susbielles, que sacó 48.112, Kicillof 37.150 y Massa 35.989. Según comentaron desde la oposición, los candidatos locales nunca nombraron ni a Axel Kicillof ni a Sergio Massa en sus actos de campaña.
Coronel Suárez también generó polémica. Ricardo Moccero recibió 8.989 votos mientras que el mandamás bonaerense 5.269 y el líder del Frente Renovador 5.254.
En la Séptima sección electoral hubo más que polémica, porque parte del propio gobierno provincial apostó, solapadamente por un jefe comunal que en las últimas horas se despidió de la política.
Azul, UP tenía dos apuestas. Por un lado el propio Hernán Bertellys, y por el otro, Nélson Sombra. El primero había prometido que si ganaba volvería al peronismo. Para eso gestó un acuerdo con un alto funcionario provincial y legisladores de la sección. El resultado fue catastrófico. No solo que Bertellys salió último en su interna (la de Juntos) sino que además avisó que ya no será parte de “la casta”.
En tanto, Sombra, postulante oficial de Unión por la Patria, ganó la interna pero realizando la peor elección del peronismo en la historia del distrito.
En resumen, Sombra cosechó 9.263, Kicillof 9.389 y Massa 9.297. Es cierto que de los tres, Kicillof fue el más votado, pero sospechan en el distrito, y ahora en alguna parte de la administración central, que tanto la jugada de Bertellys más la postulación de Sombra, sirvió de “caja” para la verdadera apuesta que era Olavarría.
En Olavarría, distrito que gobierna el PRO Ezequiel Galli, también hubo un corte de boleta sospechoso. En ese distrito, Maximiliano Wesner vpntó con 23.533 votos, mientras que Axel Kicillof solo 18716 y, claro, Sergio Massa, escasos 17.667.
También en La Plata hubo desconfianzas porque Julio Alak, ministro y candidato a intendente alcanzó 129.752 sufragios. Pero Kicillof 127.833 y Massa 118.141.
Así las cosas, PROVINCIA NOTICIAS pudo saber que en las huestes de Axel Kicillof están más que molestos y por eso, en el cónclave que sería la semana que viene, se espera que el propio gobernador pase la factura.